Todo lo que necesitas saber sobre la diabetes

Existen varias enfermedades que alteran de manera negativa el estilo de vida. Una de esas es la diabetes, la cual afecta a millones de personas a nivel mundial. Lo adecuado es realizar hábitos saludables para prevenir algún tipo de diabetes o en su caso, que ayuden a controlar los niveles de azúcar en la sangre y reducir el riesgo de otros padecimientos.

El Instituto Nacional de Salud Pública nos comenta que, durante las últimas décadas, la prevalencia de diabetes ha ido en aumento y actualmente se encuentra entre las principales causas de muerte y discapacidad en todo el mundo. El 10.5% de la población mundial (536 millones de personas) tiene diabetes y se estima que aumente al 12.2% (783 millones de personas) en el año 2045.

En México, la prevalencia de diabetes en 2018 fue de 16.8%, lo que la hace la segunda causa de muerte y la primera de discapacidad en el país. Se estimó que 31.7% de las personas con diabetes desconocen su diagnóstico, con un porcentaje mayor en menores de 40 años (65.6%) que en adultos de 60 o más (18.1%). Por esa razón, es importante conocer esta enfermedad e identificar sus síntomas para un tratamiento adecuado.

Tipos de diabetes

La diabetes es una enfermedad metabólica crónica caracterizada por niveles elevados de glucosa en sangre (o azúcar en sangre), que con el tiempo conduce a daños graves en el corazón, los vasos sanguíneos, los ojos, los riñones y los nervios. Sin embargo, antes de obtener un diagnóstico, existe una etapa de prediabetes o hiperglucemia intermedia, que reconoce a las personas con glucosa que no cumplen los criterios para el diagnóstico de diabetes, pero son demasiado elevados para considerarse normales.

National Institute Of Diabetes and Digestive and Kidney Diseases nos informa que existen tres tipos de diabetes:

Diabetes tipo 1. También llamada insulinodependiente, juvenil o de inicio en la infancia. Se caracteriza por una producción deficiente de insulina y requiere la administración diaria de la misma. Sus síntomas consisten en: excreción excesiva de orina, sed, hambre constante, pérdida de peso, trastornos visuales y cansancio.
Diabetes tipo 2. También llamada no insulinodependiente o de inicio en la edad adulta. Se debe a una utilización ineficaz de la insulina. Este aparece cuando las personas tienen un peso corporal excesivo e inactividad física.
Puede diagnosticarse solo cuando ya tiene varios años de evolución y han aparecido complicaciones. También es una enfermedad crónica no transmisible asociada con el desarrollo de enfermedad cardiovascular, cerebrovascular, enfermedad renal, ceguera he incluso amputaciones de extremidades inferiores.
Diabetes gestacional. Se caracteriza por hiperglucemia (aumento del azúcar en la sangre) que aparece durante el embarazo y alcanza valores que, pese a ser superiores a los normales, son inferiores a los establecidos para diagnosticar una diabetes. Las mujeres con diabetes gestacional corren mayor riesgo de sufrir complicaciones durante el embarazo y el parto. Además, tanto ellas como sus hijos corren mayor riesgo de padecer diabetes de tipo 2 en el futuro.

Mayo Clinic nos menciona que, por lo general, dependiendo el tipo de diabetes, se diagnostica mediante el análisis de glucemia en ayunas. Este análisis de sangre indica tu nivel promedio de glucosa de los últimos dos o tres meses. Los resultados se interpretan de la siguiente manera:

Por debajo del 5,7 % se considera normal.
Entre 5,7 % y 6,4 % se diagnostica como prediabetes.
Un nivel del 6,5 % o más en dos pruebas separadas se considera diabetes.

Si tienes algún síntoma o tienes sospechas, puedes solicitar las pruebas de examen aleatorio de glucosa en la sangre, el análisis de glucemia en ayunas, la prueba de tolerancia a la glucosa oral o si estas en etapa de gestación, la prueba de detección de la diabetes gestacional.

Consejos para prevenir o sobrellevar la diabetes

Aunque existen ciertos factores que no se pueden cambiar, como tu genética o tu edad, existen varias medidas que puedes tomar para reducir el riesgo de desarrollarla:

Infórmate continuamente. Comprender cómo afecta tu cuerpo y qué puedes hacer para controlarla es esencial. Investigar e informarte sobre este padecimiento te ayudará a tomar decisiones más acertadas sobre tu salud.
Lleva un registro. Llevar un registro de tus niveles de azúcar en sangre te ayuda a entender cómo respondes a diferentes alimentos, actividades y situaciones, permitiéndote realizar algún cambio según sea necesario.
Aliméntate sanamente. Adopta una dieta equilibrada y saludable. Consume alimentos ricos en fibras, como frutas, verduras y granos enteros, y limita la ingesta de alimentos altos en grasas saturadas y azúcares procesados.
Controla tus porciones. Aprende a controlar el tamaño de las porciones. Esto no solo ayuda a mantener un peso saludable, sino que también contribuye a un mejor control de los niveles de azúcar en sangre.
Realiza ejercicio. La actividad física regular es clave para el control de la diabetes. Incorpora ejercicios de resistencia en tu rutina diaria para mejorar la sensibilidad a la insulina y mantener un peso adecuado.
Hidrátate lo necesario. Tomar el agua necesaria ayudará al funcionamiento correcto de tu cuerpo y puede ayudar a prevenir la deshidratación, ya que es un problema común en personas con diabetes.
Controla el estrés. Practica técnicas de manejo del estrés, como la meditación, el yoga o simplemente dar paseos tranquilos. El estrés puede afectar los niveles de azúcar en sangre, por lo que es importante encontrar formas efectivas de relajación.
Cumple el tratamiento. Sigue las indicaciones de tu médico y toma tus medicamentos según lo recetado. La adherencia al tratamiento es fundamental para mantener niveles estables de glucosa en sangre.
Comunícate con tu médico. Mantén una comunicación abierta y constante con tu equipo médico. Informa sobre cualquier cambio en tu salud, ajusta tu plan de tratamiento según sea necesario y realiza chequeos regulares.
Ten tu red de apoyo. Construye una red de apoyo que incluya familiares, amigos y compañeros de diabetes. Compartir experiencias y recibir apoyo emocional puede hacer que la gestión de la diabetes sea más llevadera.

La diabetes en México es muy normal hoy en día, e implica un reto importante para el sistema de salud. La mejor recomendación siempre es NO AUTOMEDICARTE Y ACUDIR CON UN PROFESIONAL DE LA SALUD ante cualquier síntoma, ya que este podrá determinar el origen del padecimiento y utilizar los medicamentos apropiados para el tratamiento.

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