Cómo saber si estás reteniendo de líquidos y cuál puede ser la causa
La retención de líquidos, también conocida como edema, es una condición en la que los tejidos del cuerpo acumulan exceso de líquido. Esto puede causarte hinchazón en distintas zonas. Mayo Clinic señala que puede afectar cualquier parte del cuerpo, pero hay más probabilidades de que aparezca en piernas y pies.
Aunque la retención de líquidos no siempre es grave, es necesario estar atentos a las señales de retención de líquidos para poder tratar el problema adecuadamente y así hacer las modificaciones necesarias en nuestro estilo de vida.
Señales de retención de líquidos
Una de las principales señales de que se está reteniendo líquidos es un aumento repentino de peso sin cambios significativos en la dieta o la actividad física. Esto se debe a que el exceso de líquido acumulado en los tejidos agrega peso extra al cuerpo.
Otra señal común es la hinchazón, especialmente en las extremidades inferiores como las piernas, los pies y los tobillos. La hinchazón también puede aparecer en los dedos de las manos, el abdomen y el rostro. La piel de las áreas hinchadas puede sentirse más tirante o rígida de lo normal.
Algunas personas con retención de líquidos también experimentan una sensación de pesadez u opresión en las zonas afectadas. Además, al presionar suavemente la piel hinchada, puede quedar una pequeña marca o huella que demora en disolverse.
Es importante tener en cuenta que la retención de líquidos puede manifestarse de diferentes maneras y variar de una persona a otra. Por lo tanto, es crucial estar atento a cualquier cambio inusual en el aspecto o la sensación del cuerpo.
¿Qué enfermedades provocan la retención de líquidos?
Existen diversas causas que pueden provocar la retención de líquidos. Algunas de las más comunes señaladas por medlineplus y Cleveland Clinic incluyen:
- Problemas hormonales: Los cambios hormonales, como los experimentados durante el síndrome premenstrual o el embarazo, pueden desencadenar la retención de líquidos.
- Problemas cardiovasculares: Enfermedades cardíacas, como la insuficiencia cardíaca, pueden causar acumulación de líquido en los tejidos.
- Problemas renales: Trastornos renales, como la insuficiencia renal, pueden afectar la capacidad del cuerpo para eliminar eficazmente el exceso de líquido.
- Ingesta excesiva de sal: El consumo excesivo de sal puede provocar que el cuerpo retenga más líquido.
- Inactividad o sedentarismo: La falta de movimiento y actividad física puede contribuir a la acumulación de líquido en los tejidos.
- Reacciones a medicamentos: Ciertos medicamentos, como los antiinflamatorios no esteroideos (AINE) o los corticosteroides, pueden causar retención de líquidos como efecto secundario.
- Exposición al calor o la humedad: Las altas temperaturas y la humedad elevada pueden aumentar la retención de líquidos, especialmente en las extremidades.
Es importante recalcar que la retención de líquidos puede ser un síntoma de una afección más grave. Por lo tanto, si se presentan signos persistentes o preocupantes, es fundamental consultar a un médico para que realice una evaluación exhaustiva y determine la causa específica. Puedes acudir a uno de los consultorios de Inmédica.
Recuerde, la salud y el bienestar son primordiales, y un diagnóstico y tratamiento tempranos pueden hacer una gran diferencia.